En 2020 y 2021, España se colocó como el primer país del mundo en el consumo de ansiolíticos. Se ha visto que la mitad de la población de España refiere haber padecido en algún momento un ataque de ansiedad y un 42% depresión.
En los últimos años, se ha visto un incremento en el consumo de ansiolíticos, hipnóticos así como de sedantes. En la actualidad el ansiolítico más consumido es el lorazepam, conocido como el Orfidal, seguido de Alprazolam y Diazepam, el cual se ha incrementado en un 110% su uso. Por otro lado, ha aumentado en un 23,5% el consumo de hipnosedantes en la población entre 15 y 64 años. Además, más de 700.000 personas iniciaron el consumo de este fármaco en este último año. El uso de este tipo de psicofármacos, se ha incrementado en gran medida sobre todo en las mujeres de todas las edades. De igual manera, el pico de consumo máximo del mismo, se sitúa entre los 55 y los 64 años de edad.
En diversas comunidades autónomas de España se han llevado a cabo huelgas de los profesionales sanitarios, debido a una carencia de recursos sanitarios a la hora de prestar servicio a los pacientes que acuden, lo que ha repercutido en la eficacia de sus intervenciones.
Además, cabe añadir que no hay suficientes profesionales especializados en Atención Primaria encargados de atender las necesidades de la población que padece problemas de salud mental. Debido a esta precaria situación, los médicos de Atención Primaria afirman que la presión del tiempo en la consulta, así como la falta de recursos, y la falta de formación de de los profesionales para atender este tipo de casos, ocasiona que se recurra en gran medida al tratamiento farmacológico.
El 95,4% de los psicofármacos consumidos se obtuvieron mediante receta médica y en más de la mitad de los casos han sido prescritos por médicos de Atención Primaria. Sin embargo, se ha observado como el uso de psicofármacos no soluciona un problema de ansiedad o de depresión. Por otro lado, según el Ministerio de Sanidad, las benzodiacepinas tienen un corto periodo de eficacia, así como los ansiolíticos o hipnóticos. En personas de 65 años los ansiolíticos se asocian a un posible deterioro del funcionamiento cognitivo así como una disminución de la movilidad y un aumento del riesgo de caídas. Estas consecuencias se han visto agravadas por un tratamiento prolongado.
Antonio Cano Vindel, catedrático de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid y expresidente de la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés (SEAS), refiere que estos psicofármacos disminuyen durante unas horas la activación fisiológica que se asocia a la ansiedad. Sin embargo, no soluciona las causas que han provocado este trastorno, ocasionando que continúe en el tiempo. Cabe mencionar, que este tipo de fármacos, así como las benzodiacepinas, se asocian con el desarrollo de una dependencia física y psicológica.
Por ello, para los distintos tipos de problemas mentales, se recomienda combinar la terapia farmacológica junto con la terapia psicológica siendo ambas mucho más efectivas en su conjunto que de manera individual. En grupoVOLMAE estamos a tu disposición si lo necesitas. Si lo consideras necesario, no dudes en pedir cita. Estaremos encantados de ayudarte.
Reviejo, S. F. (2023, Marzo 18). España ya es el país del mundo que más diazepam consume al dispararse un 110% su uso. Público.